Revistas en archivo y siempre vigentes. Hoy: “Humor”
En el trayecto de nuestras vidas, siempre nos acompañaron numerosas publicaciones de todo tipo. Desde el libro de los primeros grados de la escuela, mamá me ama, hasta los versos de Becquer en la adolescencia, ¿qué es poesía?, me dices, mientras clavas en mis pupilas tu pupila azul…
Revistas, cuadernillos, libros, diarios, pasaron por nuestras manos y por nuestro asombro. Hay revistas que sembraron la costumbre de mirar el mundo a través de colores, fotos, historias, crónicas con nombres que están en algunas repisas de algunas casas o en esos rincones donde se guarda lo que no se usa ni se tira, pero que es el lazo que nos mantiene atados a un momento o varios que no queremos largar.
El Hogar, Tia Vicenta, Satiricón, Crisis, Pájaro de fuego, El Porteño, Somos, El periodista, Confirmado, La Maga, Cerdos y Peces, El imaginario, y más, muchas más, hasta que llega Humor y nos pega el sacudón que despierta lo mejor y lo peor de nosotros mismos.
Humor fue fundada en el año 1978 por Andrés Cascioli, un muchacho de Avellaneda que tenía talento para muchas cosas pero con el humor y el dibujo más aún y que hoy, de no haber muerto en el año 2009, tendría 86 años.
Había fundado la revista Satiricón con Oscar Blotta en el año 1972, entonces la Argentina hacía ruidos por todos lados. Inteligente Satiricón se reía de la realidad con ese humor que daba ganas de llorar pero no tanto. Cuando cierra Satiricón, Cascioli funda la editorial de la Urraca, para lanzar su revista “Chaupinela” que tuvo corta vida hasta que llegó Humor.
¡Ahí sí que Andrés se destapó con todo!. Un equipo de periodistas de fuste y escritores destacados, derramaron las crónicas, notas, entrevistas, críticas con caricaturas llamativamente perfectas y que hacían gala de lo que el intelecto nacional podía dar.
Jorge Grinzburg, Carlos Abrevaya, Osvaldo Soriano, Mona Moncalvillo, Aída Bortnik, José P. Feinmman, Oscar Castelo, Gloria Guerrero, Miguel Grimberg, Sandra Ruso, A. Dolina, investigando se lucían Enrique Vazquez, Horacio Verbitsky y Héctor Ruiz Nuñez, sumándose en cada edición otros nombres de valía.
Tomás Sanz fue su director durante mucho tiempo Cascioli desafió a la dictadura y aportó con la revista una ventana por la que asomábamos a respirar un poco de aire puro. Era un desafío verdadero publicar críticas al gobierno de facto y tomarle el pelo a más de una situación planteada como medida de gobierno. Cada una de las notas tenía una profunda mirada sobre el presente proyectándose al futuro, lo que significaba encender una luz roja que titilaba ante nuestros ojos cada dia, cada hora, en los peores momentos que se vivía.
La cultura, desde el arte, tuvo una presencia fundamental en las revistas nombradas y en particular en Humor: el rock, el teatro, la literatura tenían un espacio importante, teniendo en cuenta que los hacedores venían de Uruguay, Paraguay y de distintos puntos de la Argentina, con una presencia de América que se agradecía.
En Humor, los historietistas dinamizaron la lectura de la misma, con Fontanarrosa, Altuna, Meijide, Tabaré, Aquiles Fabre, Rep provocándonos la risa hasta quedar serios de tanta verdad.
La Revista Humor llegó hasta el año 1999 con el número 566 bajo la presidencia de Carlos Menem, después de haber sufrido persecuciones, amenazas y cierres varios, y condena a su director: Tomás Sanz por injurias.
La historia escribe sin pausa la vida del país, y el periodismo es una actividad humana tan preciada como despreciada por distintas razones, Miradas interesadas en ir un poco más allá de lo que le indica la realidad, buceadores inclaudicables de la verdad, osados caminantes de senderos peligrosos donde el enemigo es alguien a quien hay que ponerle nombre y, allí está el peligro. Lo demás es riesgo.
Inolvidable Humor.