La aventura de soltar mis queridos vinilos
Les cuento algo: este domingo voy a llevar muchos de mis discos de vinilo para venderlos en la "9° Feria del Club del Vinilo Neuquén"
Vender mis vinilos es abrir otra puerta a lo que vendrá. En algún “tocadiscos” estará rodando la música que elegí durante tantos años de radio y la que heredé de personas que estuvieron formando parte de mi vida profesional.
Siempre consideré que la música es el lenguaje que nos e identifica, es la que trae el perfume de un momento inolvidable, la que recuerda aquel abrazo irrepetible, la que estuvo en la tristeza, en la soledad, en la lucha por tantas cosas, en la alegría de celebraciones y en la esperanza de seguir.
Pertenezco a la generación de los románticos y de los que engrosaron las filas de “la protesta”, de los que tuvieron que escuchar por primera vez a Bach y sorprenderse y llegar a la cumbia, al rap, al trap de un solo viaje.
Pertenezco enamorada , a las filas de los cubanos y su trova: Bola de Nieve, Silvio, Feliú, Pablo Milanés, de la venezolana Soledad Bravo y del grupo Madera, de los brasileros, Gal Costa, Caetano, Gilberto Gil, Regina y tantos, de los peruanos como Chabuca, chilenos como los Inti, los Jaivas, Víctor, y la maestra Violeta Parra, los uruguayos y sus murgas, Viglietti y Zitarrosa, Jaime Ros, los mexicanos como Manzanero, los Panchos, la genial Chavela Vargas, la guerrera Lila Downs, los colombianos como los Wawancó, la Momposina, Carlos Vives, el ecuatoriano Jaramillo y tantos más.
¿Y qué decir de los argentinos?: paisajes, hombres, mujeres, pueblos contados y cantados a través de los populares como Víctor Heredia, Mercedes Sosa, León Gieco, Eduardo Falú, Ayala, Navarro, Suna, María Graña, Castilla, Leguizamón, Atahualpa, Piazzolla, el Polaco, y un sin número con los que se puede empapelar todos los muros del país.
Tengo un lugar amoroso e incondicional con la cantidad de músicos de esta región que pasaron por los programas de radio que conduje en la zona. Folklore, jazz, tango, rock, coral y todos los ritmos bajo un mismo sentir esta tierra que nos cobija. Cada uno de ellos mereció mi atención y admiración por el talento y la pasión que entregaron en su camino. Ya encontraré el espacio adecuado para compartir el enorme material que guardo de ellos.
Música, y más música, arte y más arte y todas las puertas se abren para habitar un planeta mejor, mucho mejor.
Los vinilos son documentos que nos inter relaciona y nos acerca, historia que nos pertenece, vidas y talentos que admiramos y agradecemos.
De mano en mano, a seguir andando, a seguir girando.
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